El pasado 21 de marzo comenzó la primavera, coincidiendo con el Día del Árbol.
Una fecha que desde Más Madrid han querido celebrar presentando una nueva medida de cara al proyecto de ciudad que la formación tratará de poner en marcha a partir de las elecciones del próximo 28 de mayo.
El portavoz de campaña municipal, Eduardo Rubiño, ha sido el encargado de hacer el anuncio, aprovechando la celebración para "poner en valor su importancia para una ciudad más saludable y agradable".
Así, Rubiño ha destacado que “frente al cemento y el gris nosotros nos comprometemos a poner en marcha un plan de plantación y cuidado de los árboles de forma que haya en las calles de nuestra ciudad, como mínimo un árbol cada siete metros, siempre que sea posible (es decir en calles que tengan una anchura de al menos 15 metros)”.
Una iniciativa que supondría aumentar el número de ejemplares de la ciudad en un 33%, con la plantación de cerca de 75.000 árboles, aseguran.
La política medioambiental de Almeida se define en una palabra: arrasar. El alcalde que odiaba los árboles, al final ese va a ser su legado
El objetivo de los de Rita Maestre es cumplir con la regla 3/30/3000, es decir, "que todas las personas vean al menos 3 árboles desde su hogar, que los vecindarios tengan al menos un 30% de cobertura vegetal, y que a menos de 300 metros haya un parque o espacio verde público de calidad".
Desde la formación trasladan los beneficios de esta pauta que supondría "reducir considerablemente el número de muertes en las ciudades durante los veranos" ante la reducción de las altas temperaturas y la absorción del CO2 por parte del arbolado.
Por otro lado, el "reverdecer" de la ciudad pasaría por una red de calles conectadas e incorporadas a una infraestructura verde y área metropolitana en la ciudad, garantizando "corredores ecológicos".
La 'Red Verde' de Más Madrid propone dos tipos de calles: grandes avenidas donde "los coches dejarán de ser los amos y ganarán espacio los peatones, buses y bicicletas" y, por otro lado, las calles secundarias donde se pretende establecer prioridad peatonal en 235 kilómetros.
Ante las noticias de tala de arbolado, Rubiño ha acusado al Ayuntamiento de "esta vergüenza" afirmando que "cualquier excusa es buena para que haya un árbol menos".