Las relaciones entre PSOE y PP en Moraleja de Enmedio empeoran en vez de mejorar. Tras el primer pleno ordinario de esta legislatura en el que se vivieron momentos de tensión, ahora se ha producido otro desencuentro entre concejales de la Corporación municipal.
La edil socialista Mª Ángeles Fernández explica que el pasado 11 de diciembre acudió al Ayuntamiento para saludar a algunas trabajadoras municipales a las que hacía bastante tiempo que no veía y con las que mantiene una muy buena relación tras dos legislaturas de trabajo conjunto. La concejala cuenta que “mientras estaba en un despacho con la puerta abierta, acudió el concejal y segundo teniente de Alcalde, Miguel Rodríguez Alcañiz, a preguntar el motivo por el que estaba allí. Le respondí que había acudido a saludar a las trabajadoras y a entregarles algo que me habían encargado. Me dijo que no podía estar allí y que lo que tuviera que darles lo hiciera fuera. En una frase, que me fuera del Ayuntamiento”.
Mª Ángeles Fernández contó lo sucedido en redes sociales y afirma no entender “el motivo por el que una concejala electa no pueda acudir al Ayuntamiento y tenga prohibido relacionarse con trabajadores que durante 8 años hemos estado trabajando juntos. ¿Qué problema tiene el equipo de Gobierno del PP-Vox con los concejales socialistas que siguen sin darnos un despacho como dice la ley, que no nos dan ninguna información solicitada y ahora nos niegan que podamos acudir al Ayuntamiento?”
El Ayuntamiento niega la expulsión
Desde la otra parte, el Partido Popular sostiene que efectivamente Mª Ángeles Fernández acudió al consistorio “sin previo aviso” y que “Miguel Rodríguez subió al despacho a preguntarle si necesitaba algo, a lo que ella respondió que no estaba solicitando información ni cada por el estilo”. Los populares afirman que “estaba vendiendo papeletas de lotería a algunos trabajadores del Ayuntamiento. Todo esto se produjo en horario laboral y en el despacho de los trabajadores, por lo que Miguel le comentó que no le parecía lugar, ni momento, porque estaban en horario laboral y en sus puestos de trabajo, desarrollando sus funciones”.
“Ante este comentario dicho por el concejal, con total naturalidad, tranquilidad y sentido común y respeto -continúan-, dijo que la estaban echando, pero en ningún momento le dijimos que se fuera, se fue ella por iniciativa propia”.
El equipo de Gobierno explica, además, que “queremos garantizar el buen servicio a todos los vecinos, cuidando y respetando los horarios laborales de nuestros trabajadores para obtener la mejor gestión posible, garantizando así el mejor servicio para todos. Los trabajadores tienen su rato de descanso diario, que disfrutan cada día, en el que pueden realizar con total libertad lo que necesiten o crean oportuno”.