Morata de Tajuña cuenta con ocho desfibriladores fijos y dos móviles, un dispositivo por cada 755 habitantes, lo que lo ha convertido en uno de los municipios más cardioprotegidos de la Comunidad de Madrid.
El programa ‘Morata Municipio Cardioprotegido’ busca hacer frente a un problema que provoca la muerte, cada año, de 30.000 personas en España fuera del ámbito hospitalario. Para ello, es fundamental actuar en los cinco primeros minutos después de la parada cardiaca.
Estos productos se encuentras repartidos en distintos puntos de Morata: ayuntamiento, Polideportivo, piscina y Campo de Fútbol Municipales, CEIP Claudio Vázquez, SIES Anselmo Lorenzo, la iglesia parroquial y el Centro Municipal de Mayores, además de dos unidades móviles para Protección Civil y Policía Local. Los desfibriladores están situados de forma estratégica con el fin de actuar, por parte tanto de profesionales de la salud como cualquier ciudadano, ante situaciones de emergencia como consecuencia de una parada cardiaca sufrida por un tercero, evitando de su muerte súbita.
Morata cuenta con ocho desfibriladores fijos y dos móviles
Instalación de desfibriladores fuera del ámbito sanitario
Un desfibrilador es un producto sanitario homologado capaz de analizar el ritmo cardiaco, identificar las arritmias mortales tributarias de desfibrilación y administrar, en caso necesario, una descarga eléctrica con la finalidad de restablecer el ritmo cardiaco viable.
El Decreto 78/2017, de 12 de septiembre, del Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid, regula la instalación y utilización de desfibriladores externos fuera del ámbito sanitario y marca una serie de lugares en los que es obligatorio contar con uno de estos dispositivos: grandes establecimientos comerciales con una superficie superior a 2.500 m2, aeropuertos, instalaciones de transporte, establecimientos públicos con un aforo igual o superior a 2.000 personas, establecimientos dependientes de las Administraciones Públicas, instalaciones deportivas con más de 500 usuarios diarios, establecimientos hoteleros con más de 100 plazas, centros educativos, centros de trabajo con más de 250 trabajadores y centros residenciales de mayores con 200 plazas.
La instalación, retirada, modificación y cambio de titularidad de desfibriladores de uso externo fuera del ámbito sanitario debe notificarse por los responsables de actividades obligadas y los interesados que decidan instalarlo de forma voluntaria. Asimismo, debe comunicarse cada uso del desfibrilador instalado.
¿Quién puede utilizar un desfibrilador?
Solo el personal sanitario y los técnicos en emergencias sanitarias podrán utilizar los desfibriladores. También podrán hace uso aquellas personas que posean conocimientos mínimos y básicos tras realizar una formación. Aún así, frente a una situación excepcional, el personal profesional autorizará su utilización a través del teléfono 112, pero siempre bajo su supervisión.
La solicitud de un desfibrilador se puede realizar de forma electrónica accediendo a la Sede electrónica y rellenando el formulario. También es posible realizarla de forma presencial en los lugares habilitados con cita previa.