Tras las últimas lluvias, 242 personas tuvieron que ser desalojadas temporalmente del asentamiento irregular de Las Sabinas Centro ante la crecida del Río Guadarrama a su paso por Móstoles. Ecologistas en acción insiste en que la solución pasa por el realojo definitivo de las familias que viven en la zona, ya que su situación, aseguran, "es insostenible".
Según Raúl Navarrete, portavoz de la asociación, “aunque siempre son positivos los planes de prevención de catástrofes naturales, no es aceptable que se siga retrasando sine die lo inevitable, el total realojo del asentamiento. Todos los años, el Río Guadarrama se desborda entre dos y tres veces en esa zona. Es lo natural. Lo que no es natural, ni legal, ni sensato, es permitir construcciones en zona inundable”.
Para Navarrete “es del todo inaceptable que más de 60 familias vivan aún en zona inundable y suelo no urbanizable protegido por ser Dominio Público Hidraúlico, Parque Regional y Vía Pecuaria. Viven sin alumbrado público, con luz enganchada, sin calles asfaltadas, sin alcantarillado, sin contenedores de residuos de ningún tipo, rodeados de su propia basura y vertidos de escombros. A eso hay que añadirle el hecho de que el río se desborda hasta tres veces al año, y estas personas viven dentro del cauce legal del mismo. Es inaceptable, se mire por donde se mire”.
Los suelos que ocupan las familias a realojar forman parte del Parque Regional del curso medio del Río Guadarrama. Además, ocupan parte del Dominio Público Hidraúlico del río, con evidente riesgo de inundación. Por último, atraviesan la zona el Cordel Real del Guadarrama y el Abrevadero del Barranco de la Vega, dos vías pecuarias. Todas esas figuras de protección hacen que el suelo sea 'no urbanizable y de especial protección'.
Acuerdo de realojo pendiente de ejecución
Lo anunció la propia Comunidad de Madrid en su Boletín Oficial hace dos años. El acuerdo, realizado entre la Agencia de Vivienda Social regional y el Ayuntamiento de Móstoles, incluye el realojamiento de 68 familias del núcleo de viviendas irregulares “Río Guadarrama-Las Sabinas”. Así mismo, se tiene en cuenta “la posterior intervención social y seguimiento de las mismas en vivienda en altura”.
Este acuerdo completará el trabajo del convenio de 2013, que se basó en un censo de 2008, "en el que no estaban incluidas muchas familias que no cumplían las condiciones". Según la asociación, el realojo "tiene que ser transparente y de la mejor manera posible, comunicando en todo momento a los interesados cómo se va a desarrollar".
Lo que no es natural, ni legal, ni sensato, es permitir construcciones en zona inundable
No obstante, Ecologistas en Acción recuerda que “aún queda mucho trabajo para ver restaurada la ribera del Río Guadarrama y las vías pecuarias que la recorren. Tras la eliminación de las viviendas, los residuos deben ser correctamente eliminados. Después, los caminos de acceso deben ser cortados al paso rodado no autorizado, para evitar nuevos asentamientos o vertidos indeseados”. Por último, solicitan que “la zona sea restaurada ambientalmente con planta autóctona del Parque Regional y convenientemente mantenida”.