El Consistorio ha iniciado la campaña anual de control de la oruga procesionaria. Durante la campaña se tratarán más de 2.900 ejemplares de pino y cedro, su hábitat natural.
Desde el comienzo del mes de octubre y hasta enero, periodo en el que el insecto está en su fase larvaria y es más efectivo el tratamiento, los técnicos del área de parques y jardines de la Concejalía de Mejora y Mantenimiento de los Espacios Públicos tratarán los ejemplares que se sitúan en espacios públicos como colegios, parques y arbolado ubicado en las calles del municipio.
El tratamiento que están llevando a cabo se realiza principalmente mediante endoterapia, una técnica que consiste en el inyectado de los productos insecticidas directamente a los pinos y cedros, de manera que afecta solo a los insectos que parasitan a estos árboles y no al resto de la fauna, ni a la población ni a las mascotas.
El tratamiento se realiza a través de endoterapia y, en los casos de grandes masas arbóreas, como en el Parque Finca Liana, mediante fumigación masiva.
En el caso de grandes masas uniformes de pino el tratamiento se combina con fumigaciones localizadas mediante pulverización. En Móstoles, la fumigación masiva se llevará a cabo próximamente en el parque Finca Liana. Durante la actuación, el recinto permanecerá cerrado al público.
La procesionaria debilita los árboles a los que afecta al alimentarse de los brotes más tiernos. Es, además, un insecto considerado como muy tóxico para los seres humanos (produce urticarias y alergias) y para las mascotas (a las que les provoca inflamación de labios, boca y lengua).
Por minimizar los riesgos y evitar la proliferación de esta oruga en primavera, desde el Consistorio apelan al compromiso de las comunidades de vecinos que sean propietarias de zonas arboladas con presencia de pinos y cedros para que realicen los tratamientos correspondientes. Para ello, se les ofrece asesoramiento técnico, si lo necesitan, en lo que respecta a los productos fitosanitarios recomendados y el momento de aplicación.