Con motivo del XXVII aniversario del homicidio de Miguel Ángel Blanco a manos de ETA, el Ayuntamiento de Móstoles organizó un homenaje en el monolito a las víctimas del terrorismo, situado en el Parque Lineal Arroyo del Soto. Se cumplen veintisiete años desde su secuestro y posterior asesinato el 13 de julio de 1997.
Flores blancas bajo los acordes de violín del profesor Raúl Oliveros protagonizaron el acto, mediado por el alcalde, Manuel Bautista, acompañado por varios diputados de la Asamblea de Madrid y miembros de la Corporación municipal, así como agentes policiales de la localidad, Protección Civil o representantes del tejido asociativo de Móstoles y vecinos.
El primer edil quiso destacar que se trata de un homenaje por “el recuerdo, la memoria y el rechazo a quienes defienden sus ideas con la violencia y no con la palabra”. Bautista añadía que con celebraciones como estas, esperan combatir “el odio y la intolerancia de quien piensa diferente”.
El lema de este año, promovido desde la Fundación Miguel Ángel Blanco, es “Tú y todos” con el objetivo de mantener viva la memoria de todas las víctimas del terrorismo, mostrar apoyo a los familiares y evitar que este tipo de actos no se repitan ni caigan en el olvido. Y es que, como bien explicó el alcalde, “aquel que no conoce la historia está abocado a repetirla”.
El asesinato de Miguel Ángel Blanco conmocionó a toda la sociedad española e incentivó a que millones de personas salieran a las calles en señal de repulsa. El primer edil sentenció que su muerte “fue un punto de inflexión en la historia de España” y, a partir de ese momento, "nos plantamos contra la violencia y la sinrazón de unos pocos. Decidimos que nuestro rumbo lo debía marcar la democracia y la libertad, no el terror”.
Su muerte fue un punto de inflexión en la historia de España