Móstoles vivió uno de los días más esperados del año para todos los mostoleños: el que marca el comienzo de las Fiestas Patronales en honor a Nuestra Señora de los Santos y San Simón de Rojas, declaradas de Interés Turístico Regional desde el 2010.
Como es tradición, el alcalde, Manuel Bautista, la concejal de Educación y Festejos, Cristina Molina, miembros de la Corporación Municipal, peñas, hermandades, casas regionales y numerosos vecinos arroparon a la Patrona de la ciudad en la ofrenda floral.
Este año se estrenó una nueva estructura, totalmente segura, sobre todo para voluntarios que subieron los ramos al tapiz floral. Fruto de un acuerdo entre el Ayuntamiento de Móstoles y la Hermandad de Nuestra Señora de los Santos y San Simón de Rojas, facilita la colocación de los ramos de forma segura, lo que permitió que los cerca de 3.000 personas que entregaron su ramo lo pudieran hacer sin ningún tipo de percance.
Precediendo al pregón, el desfile de gigantes y cabezudos volvió a recorrer las calles del centro al compás de la Banda Juvenil y Grupo de Majorettes de Móstoles para el disfrute de los vecinos. Ante una Plaza de España abarrotada, el alcalde destacó en el pregón la importancia de peñas, asociaciones y diferentes colectivos que “contribuyen para que estas fiestas sean de renombre y un referente en toda la Comunidad”.
“Los días de fiesta que tenemos por delante son el pretexto para disfrutar con nuestra familia y con nuestros amigos de las tradiciones que nos caracterizan. Nuestra ciudad no sería Móstoles sin su Patrona, sin el espíritu de unión que nos motivó a batallar por la libertad en 1808, sin su historia y sin sus vecinos, que llevan con orgullo la bandera de nuestra ciudad y que tan bien la representan”, añadió.
Los días de fiesta que tenemos por delante son el pretexto para disfrutar con nuestra familia y con nuestros amigos de las tradiciones que nos caracterizan
El pregón corrió a cargo del judoca mostoleño Fran Garrigós, medallista en los pasados Juegos Olímpicos de París 2024, quien invitó y animó a todos los vecinos y visitantes a disfrutar de las fiestas. Tras el chupinazo, que inició oficialmente las fiestas, se llevó a cabo el descubrimiento del cuadro de pañuelos junto a la estatua del peñero. Acto seguido, representantes de las hermandades, colectivos, asociaciones, peñas y miembros del Gobierno Municipal se desplazaron a la Ermita de Nuestra Señora de los Santos para asistir a la solemne salve cantada.
A las 22 horas, la orquesta Jelmi llegó a la Plaza del Pradillo para ofrecer un baile para mayores cargado de clásicos de la música nacional. Posteriormente, el cielo de Móstoles se llenó de luz y colores con el tradicional espectáculo de fuegos artificiales.
La jornada finalizó con el concierto de la orquesta Panorama, una de las mejores orquestas de la escena nacional, que congregó a miles de mostoleños y visitantes que no pararon de cantar y bailar con grandes éxitos de la música de ayer y de hoy. Por primera vez, las personas con diversidad funcional tuvieron prioridad en el acceso al concierto, pudiendo disfrutar del espectáculo en una zona reservada.