Sobresaliente alto. Quizá esa sea la nota que merecen nuestras chicas del rugby, más conocidas como las Jabatas. Tras esquivar todos los obstáculos que se han puesto por delante, las mostoleñas han luchado, hasta el final, por el ascenso.
La temporada arrancó sin un campo para entrenar y con las fichas justas para afrontar un año que, a pesar de los inconvenientes, prometía ser tan bonito como ambicioso. Y así ha sido. Nuestras jabatas han peleado hasta el último minuto, apurando sus opciones de cumplir su gran sueño.
Las dos derrotas en los dos primeros encuentros de liga, ante el Sanse Scrum y la A.D. Ingenieros Industriales Las Rozas –ésta especialmente dolorosa-, no hicieron mella en las ilusiones de las nuestras, que sí consiguieron vencer en el tercer partido.
Fue contra C.R. Majadahonda. Una victoria que se sumó a la de la cuarta jornada, contra Torrelodones. Las buenas actuaciones de las siguientes jornadas sirvieron para afianzar a un equipo que, justo antes de Navidad, tras ganar a Getafe, se puso segundo.
Las victorias en el inicio de 2018 ante los dos conjuntos de Pozuelo de Alarcón sirvieron para afianzar su puesto en el grupo de ascenso, que se disputaría durante la segunda vuelta. Un grupo en el que, los seis primeros conjuntos de la liga, se enfrentarían entre ellos.
Ahora, toca descansar y empezar a pensar en el torneo de rugby 7, donde las Jabatas disputarán la Copa de la Reina
El objetivo era claro: quedar entre los dos primeros para jugar División de Honor B. Sin embargo, el primer bache llegó pronto. En el primer encuentro, las nuestras cayeron frente al C.R. Majadahonda.
En la segunda jornada de esta segunda vuelta, las mostoleñas no pasaron del empate frente al XV de Hortaleza. Habría que esperar hasta la siguiente jornada para que llegase la primera victoria contra el Olímpico de Pozuelo.
La victoria sumó opciones a las nuestras, que necesitaban ganar al Arquitectura para seguir optando a la segunda posición. El equipo no supo encontrar su juego y la derrota hizo que las Jabatas perdiesen la posibilidad de ascenso.
La liga se cerró con una derrota ante el mejor equipo de la temporada, el Ingenieros Industriales de Las Rozas. De esta forma, las nuestras terminaron la competición regional en cuarto lugar.
Ahora, toca descansar y empezar a pensar en el torneo de rugby 7, donde las Jabatas disputarán la Copa de la Reina. El objetivo principal de las chicas será mejorar la posición que consiguieron el año pasado, enfrentándose a los mejores conjuntos de España. ¡Mucha suerte, chicas!