Un nuevo tsunami político alcanza Móstoles. Tras la sucesión de escándalos protagonizados por la regidora, Noelia Posse, ahora el foco de la polémica se sitúa sobre la Concejalía de Urbanismo. La oleada de dimisiones la inauguró el hasta ahora gerente de Urbanismo, Jesús Miguel Espelosín, quien dimitió el pasado viernes “por motivos personales”. Una dimisión que llega tras la revocación de su nombramiento por un juez el pasado mes de septiembre al “no poder demostrar 15 años de experiencia profesional”.
Tras Espelosín han abandonado la Concejalía de Urbanismo su coordinadora general, Carmen Rosas Camacho, y la Directora General del Suelo y Nuevos Desarrollos, Concepción Bárbara Rognoni, también en estos casos los “motivos personales” fueron la motivación de la renuncia.
La portavoz del grupo, Mirina Cortés, calificaba como “sospechoso” que fuese precisamente Camacho quien acreditase la experiencia que Jesús Espelosín necesitaba para ser admitido en el proceso de selección como gerente de urbanismo
Un nombramiento “obsceno”
El Partido Popular de Móstoles fue especialmente crítico con el nombramiento de Camacho. La agrupación vio en la designación de la coordinadora general de Urbanismo “un nuevo caso de enchufismo” de la alcaldesa Noelia Posse quien seguía dando muestras de “nepotismo” en un nuevo caso que excedía lo “obsceno” y rozaba “presuntamente la ilegalidad”. La portavoz del grupo, Mirina Cortés, calificaba como “sospechoso” que fuese precisamente Camacho quien acreditase la experiencia que Jesús Espelosín necesitaba para ser admitido en el proceso de selección como gerente de urbanismo en el año 2018, y gracias a este informe Espelosín fue nombrado gerente.
El PP también hacía alusión en un mismo comunicado remitido a los medios de comunicación a Concepción Bárbara Rognani. “El nombramiento de la Coordinadora General de Urbanismo, se ha realizado siguiendo el mismo proceso que el de la ex concejal socialista de Illescas como Directora General del Suelo y Nuevos Desarrollos; por libre designación, con agosticidad y valorando la idoneidad de los aspirantes una concejal de gobierno de Posse”.
Ahora, los integrantes del triángulo de la discordia de la Concejalía de Urbanismo abandonan sus cargos mientras el consistorio mostoleño guarda silencio y rehúsa hacer declaraciones al respecto.