Nadie podía esperar, allá por el mes de agosto, que el Ciudad de Móstoles fuese a estar peleando por meterse en los playoffs de ascenso a Primera división seis meses más tarde. Sobre todo, porque se trata de un proyecto humilde, que tiene, como principal objetivo, conseguir la salvación cuanto antes.
Un proyecto, además, que está repleto de gente de la casa con un futuro brillante en el fútbol sala nacional, como es el caso de Toni Escribano o Cristian. Jugadores que sienten la camiseta con la que han jugado desde que tenían 10 años -o, incluso, menos-. Y quién mejor para liderar este equipo dentro de la pista que el capitán, un jugador que lleva toda su vida vistiendo de azul: Jorge Ruiz.
Capitán y ejemplo
A pesar de su juventud, el ‘9’ ha conseguido ganarse el respeto de un vestuario en el que destaca por su seriedad. Él, curiosamente entre risas, nos explica que es “un capitán que intenta dar ejemplo”. Son ellos, los jugadores, los primeros sorprendidos por la buena marcha del equipo en Segunda división: “creo que nadie se lo esperaba. El objetivo era mantenernos y no sufrir, pero ahora miras la clasificación y parecemos otro equipo. Aun así, sabemos que el objetivo sigue siendo certificar la permanencia y, cuando se consiga, podremos soñar”.
Dentro de esa serenidad, resuena el famoso “partido a partido”, una expresión que se ha convertido en el lema del conjunto entrenado por ‘Santa’. Sin embargo, y como explica el propio Jorge, “la euforia es buena. Si la gente está contenta y ve que los resultados acompañan, juntamos más gente en el Villafontana y el equipo crece”.
El brazalete se lleva con mucha responsabilidad, sabiendo que eres ejemplo de muchos niños
‘Santa’, el líder
Un ‘Santa’ del que todos hablan maravillas dentro del vestuario, a pesar de ser un técnico muy exigente. “A mí me gustan los entrenadores así”, asegura el capitán del equipo, recordando que, “si no fuera por él, yo no estaría aquí”. Fue el míster el que, estando en Tercera división, supo ver el potencial de un jugador que se ha convertido en uno de los pilares del conjunto mostoleño.
Haciendo autocrítica, Jorge afirma no estar dando su 100% en esta campaña, debido a unas lesiones que le han frenado su progresión durante la temporada. Es un hecho que no le impide estar disfrutando de un año de ensueño, siendo capitán del Ciudad de Móstoles en un curso histórico: “el brazalete se lleva con mucha responsabilidad, sabiendo que eres ejemplo de muchos niños”.
Un Villafontana espectacular
Un año en el que está siendo clave la afición mostoleña. “Es increíble, llenazo tras llenazo. El Villafontana se nos queda pequeño todos los fines de semana”, asegura Jorge, quien, además de ser el capitán de los mayores, entrena, junto a su compañero Toni, a uno de los Cadetes del club. “A mí me toca hacer el papel de serio, él es un niño más, si los dejase solo no sé qué podría salir de ahí”, nos cuenta, entre risas, el mostoleño.
Jorge Ruiz compagina sus estudios de Magisterio con los entrenamientos y partidos de Segunda división. Su seriedad dentro del vestuario se diluye ante el micro, mostrando su cara más cercana. El Ciudad de Móstoles tiene un líder de mucho valor. El brazalete de capitán está en el mejor brazo posible.