Es interesante prestar atención a algunas de las ideas fuerza que se están poniendo de manifiesto, tanto en los alrededores como en la propia cumbre de Davos, considerada una de las reuniones clave del capitalismo internacional desde hace décadas. En el exterior, más de 200 millonarios de todo el mundo, incluyendo a descendientes de Walt Disney, el actor Marc Ruffalo o los multimillonarios Marlene Engelhorn y Phil White manifestaron su preocupación por la creciente desigualdad tras la pandemia, agravada por los efectos del cambio climático. Denuncian que la crisis está golpeando, una vez más, a quienes menos tienen y enriqueciendo a las grandes fortunas. Denuncian que el actual sistema está fracasando y se ofrecen para pagar más impuestos para equilibrar la balanza.
En el interior de la cumbre, nada menos que el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, apuntaba a la creciente desigualdad como una de las amenazas más importantes a la que han de hacer frente las sociedades. Ambos elementos, la redistribución de la riqueza a través de políticas fiscales progresivas o la lucha contra la desigualdad que ahora generan un consenso internacional con muy pocos precedentes, han sido sin embargo duramente criticados por la derecha española, y muy particularmente por la derecha madrileña de Díaz Ayuso, que consideran estas políticas “bolivarianas” y “bolcheviques”.
La presidenta dijo en sede parlamentaria que la desigualdad no es un problema, ya que el único problema es la pobreza (no se sabe si defendía que todos fuéramos ricos, ni cómo iba a conseguirlo, ni por qué la Comunidad de Madrid se ha estabilizado la última década en torno al 19% de pobreza, situando por tanto bajo ese umbral a uno de cada cuatro madrileños).
La presidenta dijo en sede parlamentaria que la desigualdad no es un problema, ya que el único problema es la pobreza
También ha defendido las bajadas masivas de impuestos, que han beneficiado principalmente a las rentas altas (más de 1000 millones anuales dejan de pagar las fortunas de más de un millón de euros en Madrid a través de la bonificación al 100% de los impuestos de donaciones, sucesiones y patrimonio), todo ello mientras los servicios públicos hacen agua por todas partes, como en el caso de las residencias de mayores o de la sanidad, derivando a los usuarios descaradamente hacia el sector privado.
Las políticas que se nos ofrecen desde esta derecha desacompasada con los tiempos y con el entorno internacional ya ni siquiera es liberal, es sencillamente medieval. Atrapados en sus dogmas ideológicos, se desentienden en el presente de las necesidades de las personas y en el futuro inmediato de las consecuencias funestas de defender contra viento y marea un ideario que ya ha sido derrotado en el conjunto del mundo civilizado.
Desde Más Madrid tenemos el firme propósito de mostrar en la Comunidad de Madrid, y también en Móstoles, que hay una salida a este laberinto en el que nos encierran las políticas necroliberales defendidas por Ayuso y su séquito, como el señor Bautista: Cambio de modelo productivo para reindustrializar en verde, derechos sociales y laborales, redistribución de la riqueza a través de políticas fiscales justas, servicios públicos fuertes y eficaces y derecho al tiempo.
Vamos a ello.
Emilio Delgado, candidato de Más Madrid Móstoles a la Alcaldía de Móstoles.