Según la Organización Mundial de la Salud, "todas las formas de asbesto o amianto, incluido el crisolito, son cancerígenas para el ser humano". Dicha organización ha realizado reiteradas advertencias sobre "la peligrosidad de la exposición al amianto, causante de enfermedades como asbestosis, cáncer de pulmón, de laringe, etc".
La retirada de este material de construcción, muy utilizado entre los años 60 y 90, debe llevarse a cabo por profesionales capacitados y siguiendo estrictas normas de seguridad. Debido al desconocimiento ciudadano de qué hacer con estos materiales, o a la imposibilidad de poder afrontar el coste económico que supone contratar a una empresa especializada en desamiantado, los vertidos ilegales han proliferado, con el consiguiente problema que esto supone para toda la ciudadanía.
"Tanto el Gobierno de la Comunidad de Madrid como el de España y la Unión Europea tienen abiertas líneas de ayuda a los ciudadanos para paliar este problema. Los vecinos de Móstoles tienen el derecho a conocer el proceso y las ayudas económicas para afrontar la retirada de este material, ya que en la web municipal no hay ningún tipo de información para orientarles", sostienen desde VOX Móstoles.
Este material era muy común en los años 60 y 90
Por todo ello, la formación defiende la creación de un servicio de asesoramiento en la Oficina de Atención a la Vivienda que explique el proceso a seguir para la retirada segura de materiales que contengan amianto, la gestión de estos residuos, el riesgo de la manipulación cuando son retirados y los programas de ayuda económica existentes en las diferentes administraciones para la retirada segura de estos materiales tóxicos.
Además de esto, VOX plantea la necesidad de una información transparente y accesible para todos los mostoleños a través de la página web municipal sobre este ámbito.