El Hospital Universitario Rey Juan Carlos se consolida como punto oficial de registro de donantes de médula ósea, elevando a 23 los lugares que permiten la inscripción en el registro. La decisión beneficia a los vecinos de Móstoles y otros 17 municipios cercanos que ya no tendrán que desplazarse hasta Madrid.
Este tipo de donación se indica y resulta vital en casos como las leucemias agudas, tanto mieloblástica como linfoblástica; los linfomas que han recaído tras la quimioterapia y un trasplante autólogo (de las propias células del paciente) previo, y algunas enfermedades no malignas como la anemia aplásica o la anemia de Fanconi. En estos casos, las células madre hematopoyéticas donadas permitirán que la médula enferma del paciente recupere sus funciones, produciendo de nuevo células esenciales para el desarrollo del organismo.
El Centro de Transfusión ha instalado una mesa informativa en el hall principal del hospital, dónde informan y resuelven las dudas de los interesados en este tipo de donación.
¿En qué consiste la donación?
El procedimiento de donación de médula ósea se ha simplificado mucho, ya que en la mayoría de los casos la recogida de células madre hematopoyéticas se puede realizar por vía venosa, sin necesidad de entrar a quirófano.
La extracción se lleva a cabo mediante una técnica que consiste en la administración de unas inyecciones subcutáneas que tienen la capacidad de movilizar las células madre desde la médula ósea hacia la sangre periférica en cantidad suficiente para que luego sean útiles para el paciente. "Estas células sanas, las recibe el paciente mediante una infusión intravenosa, teniendo éstas la capacidad de dirigirse a su médula ósea y repoblarla, combatiendo así la enfermedad tumoral y reestableciendo su función medular normal", añade la Dra. Raquel Urbina
Se trata de "un acto de solidaridad que, mediante un procedimiento sencillo, altruista y anónimo, constituye el único tratamiento potencialmente curativo para muchas personas con determinadas patologías”, asegura la Dra. Urbina.
Un acto de solidaridad que, mediante un procedimiento sencillo, altruista y anónimo, constituye el único tratamiento potencialmente curativo para muchas personas
¿Cómo formar parte del registro de donantes?
Para poder inscribirse en el registro de donantes de médula ósea es necesario tener entre 18 y 40 años. Primero se extrae una muestra de sangre que posteriormente se estudia en el Centro de Transfusión de la Comunidad de Madrid para determinar su perfil HLA (antígenos leucocitarios humanos), y se establecerá su posible compatibilidad con un paciente.
El análisis y los datos personales del donante se incluyen en el Registro Español de Donantes de Médula Ósea (REDMO), con lo que el futuro donante queda a disposición de cualquier paciente del mundo que precise un trasplante de médula y resulte compatible. Una vez registrado, la persona se mantiene activa hasta los 60 años.
La Dra. Urbina insiste en la importancia de inscribirse en el REDMO, ya que "cuando un paciente tiene indicación de realizarse un trasplante de progenitores hematopoyéticos, la primera opción es buscar un donante entre los miembros de su propia familia, la posibilidad de que esto ocurra no supera el 30 por ciento, por no tener familiares candidatos a ser donantes o que estos no presenten una buena compatibilidad, por lo que el resto necesitará solicitar la búsqueda de un donante compatible entre los inscritos en el Redmo"