Durante estos días tiene lugar uno de los eventos más importantes del año, la Feria Internacional del Turismo. Este año, la Comunidad de Madrid promociona, entre otras, a las once Villas de la región, entre las que se encuentra Navalcarnero.
Con un Conjunto histórico considerado Bien de Interés Cultural, formado por el entorno de la Plaza de Segovia y la Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Asunción, el municipio conserva en su casco antiguo la estructura característica de una población castellana, fundada hace más de cinco siglos como cruce de caminos y parada de comerciantes.
Famoso por haber acogido el enlace de Felipe IV y Mariana de Austria -evento que a día de hoy se sigue conmemorando con una recreación de las Bodas Reales y Feria Medieval-, durante años fue principalmente tierra de agricultores, hecho que ha dejado su huella en el diseño de casas de labranza todavía presentes en sus calles.
El maridaje perfecto para esta ruta viene de la mano de su gastronomía
La visita a la localidad pasa también por lugares emblemáticos, como la Plaza e Iglesia de San José, la Plazuela del Mercado, la Ermita de San Roque, el Parque de San Sebastián o los trampantojos que decoran su núcleo urbano.
El maridaje perfecto para esta ruta viene de la mano de su gastronomía, destacando la Olla del Segador (una variedad del cocido madrileño), el cordero asado, los bollitos de aceite y sus conocidos vinos con Denominación de Origen, los cuales se pueden degustar también gracias a una iniciativa periódica que permite además adentrarse en las bodegas del pueblo.
En la línea de conservación de sus tradiciones, vecinos y visitantes tienen la oportunidad cada año de disfrutar, por otra parte, de la Fiesta de la Vendimia, la Fiesta de la Matanza y los actos religiosos y festivos en honor a San Isidro.