Ernesto Santurino, maestro de Educación Física en el CEIP Felipe IV, continúa desarrollando nuevas iniciativas de lo más original y divertido para motivar al alumnado a adquirir hábitos saludables. En esta ocasión, la inspiración viene de la serie "Juego de Tronos": el centro de convierte en la casa 'EFdragón', donde los estudiantes conseguirán recompensas sumando tiempo de vida a su marcador por cada actividad física que se practique durante su tiempo libre, por cada libro leído y por cada almuerzo equilibrado. Para ello, deberán superar misiones principales en las horas lectivas y otras de carácter secundario fuera de las aulas.
Ernesto nos explica que ha creado una página web donde los alumnos pueden ver esa evolución y hacer un seguimiento de sus hábitos saludables con un contador regresivo de vida, así como una app desde la que se puede tener un acceso al contenido de forma más exhaustiva a través de cualquier dispositivo. Una vez más, se trata de un proyecto transversal con impacto en el resto de asignaturas que imparte Santurino, con el fin de incorporar los conocimientos requeridos para cada materia. Por ello, cada estudiante ha recibido un álbum que irá rellenado si van consiguiendo los objetivos propuestos. "Así conseguimos que estén involucrado en su proceso de enseñanza-aprendizaje y que éste sea más memorable y perdure en su memoria", asegura el maestro, quien también hace referencia a que "la realización de actividad física les ayudará a conocer mejor su cuerpo y fomentar su autoestima, les pondrá en contacto con un entorno social saludable y les permitirá aceptar los éxitos y los fracasos con más facilidad".
Así conseguimos que estén involucrado en su proceso de enseñanza-aprendizaje y que éste sea más memorable y perdure en su memoria
"La Educación Física es fundamental para la salud, y el mejor momento para inculcar los hábitos saludables es desde la infancia, ya que todos aquellos comportamientos y acciones que llevamos a cabo de manera repetitiva hasta incorporarlos inconscientemente en nuestra actividad diaria devienen rutinas y hábitos. Cuando éstos redundan de manera positiva en nuestra salud física, emocional y relacional, se convierten en hábitos de vida saludable para toda la vida", añade, subrayando que "un estilo de vida saludable fomenta una buena calidad de vida, previene enfermedades y potencia factores de protección. Por eso también es necesario trabajar los hábitos alimentarios".