La famosa casa de Gran Hermano ha vuelto a abrir sus puertas, esta vez con una edición VIP con famosos de todo tipo. Una casa que abraza la diversidad, como siempre han hecho desde la cadena en la que se emite. Sin embargo, parece ser que no todo el mundo acepta todo, la transfobia ha invadido la casa en una de las discusiones y, lo peor: de una persona que pertenece al colectivo LGTBI.
Los protagonistas de esta discusión han sido Albert, más conocido como La Infanta, una persona que se define más como femenino, aunque tampoco le importa que le denominen en masculino, se siente cómodo en ambos géneros y, por otro lado, Luca Dazi, un tiktoker gay de 19 años.
Al parecer ambos iniciaron una discusión en la casa tras una de las galas que se celebran los domingos, pero la discusión se salió de control con una falta de respeto. Luca Dazi decidió atacar a Albert diciéndole “bueno… chico o chica” con un tono bastante despectivo.
Como bien sabéis siempre he estado en contra de la transfobia, pero esta vez me ha parecido el colmo de los colmos, porque que una persona del colectivo tenga que atacar a otra así es bastante penoso, hay miles de maneras de atacar a los demás o discutir, pero meterte con su género es imperdonable.
La audiencia ha decidido… No a la transfobia. Adiós a Luca, adiós a la transfobia
Pero esto no es todo, lo mejor es que Dazi ha intentado defenderse haciendo alusión a su persona, “sería echarme mierda a mí mismo”, algo que a mí no me ha convencido mucho, ya que también ha tenido otros tipos de comentarios en la casa dando a entender que esa parte de Albert no la entendía porque no ha conocido mucha gente así. Luca siempre ha presumido en sus redes sociales del dinero que tiene y estoy superseguro de que este chico se cree estar protegido por ello, pero querido Luca las fobias nos rodean a todos.
Que seas del colectivo o una persona más afeminada no te saca de que al lanzar estos tipos de mensajes de odio hagan menos daño o no sean ofensivos, al contrario, lo son y duelen más. Da pena ver como estamos luchando contra estas situaciones día a día, ver como gente no puede dar estos pasos, como La Infanta, por miedo y que cuando alguien lo haga se le machaque.
Basta ya de atacar, estamos hartos de no poder sentirnos como queremos, que no podamos hacer un concurso, una actividad o lo que nos de la gana sin recibir una mala mirada, insultos o, a veces, agresiones físicas. Este no es el mundo que deberíamos de estar construyendo, no es el respeto o la libertad que tenemos que tener, todos somos iguales y lo seguiremos siendo, pero no me sierve de nada que hagamos que entendemos la vida de todos, pero luego seamos los primeros en discriminar. Eso sí, ante todo esto solo tengo que decir una cosa, la audiencia ha decidido… No a la transfobia. Adiós a Luca, adiós a la transfobia.