La inclusión en el deporte ¿existe o son los padres? Lo digo porque de existir, ¿por qué sigue posicionándose en un escalafón inferior? En categorías menores y canales televisivos secundarios. No vaya a ser que algún niño o niña que lo vea se sienta inspirado por esos deportistas, ¿verdad? Vaya a ser que sientan que pueden conseguir todo lo que sueñan.

¿No es hipócrita reforzar las políticas educativas en igualdad, accesibilidad e inclusión cuando la realidad es que continuamos invisibilizando causas y condiciones? En ocasiones se nos olvida que el deporte bebe de la unidad, del remar juntos. El deporte nos une, ¿por qué entonces se excluyen y ponen etiquetas? Los Juegos Olímpicos por un lado, los Paralímpicos por otro; no vayamos a confundirnos. 

¿Qué mensaje le estamos dando a nuestros niños y niñas? ¿Qué existen dos mundos separados, que las diferencias pesan más que las oportunidades? Les enseñamos que unos deportes "importan más", mientras que otros se miran desde la superioridad moral, como raras avis, como “superhéroes”, como si fuéramos especies diferentes. 

¿Si dejáramos de etiquetar y empezáramos a incluir? Si los niños vieran que no hay límites para soñar, que todos pueden ser parte del mismo equipo, que el talento no entiende de barreras físicas ni sociales. El deporte inclusivo es una responsabilidad. Vamos a demostrar a las generaciones futuras que el verdadero poder del deporte está en la igualdad, en el respeto y en el abrazo a la diversidad. 

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miércoles, 27 de noviembre de 2024