El gobierno municipal no solo reconoce el problema de falta de limpieza que sufren las calles de la ciudad, sino que busca afrontarlo con soluciones efectivas y realistas que consigan erradicar la suciedad. Esta situación, heredada de mandatos anteriores, necesita, para poder ser afrontada con eficacia, de una mejora notable en la gestión, un trabajo multidisciplinar y constante, así como el desarrollo de medidas novedosas.
De momento, los primeros meses del nuevo ejecutivo han servido para que el ayuntamiento siente las bases con vista a poder afrontar (con garantías) la actual situación. A lo largo de este tiempo, el equipo de gobierno ha puesto en marcha diferentes iniciativas. En este sentido, el plan de limpieza de choque, por ejemplo, ha comenzado ya en algunas zonas.
No vamos a mentir diciendo que nuestras calles van a pasar de ser las más sucias a las más limpias en tres meses
Existen calles en las que los baldeos (limpieza de aceras con agua a presión y jabón) también se han puesto en marcha. Mención aparte merece el impulso de la eliminación de los grafitis de muchas fachadas, que tendrá como complemento el importante aumento de las sanciones para sus autores en la nueva ordenanza de convivencia. Además, se trabaja a marchas forzadas para que el nuevo contrato de limpieza viaria y recogida de residuos salga adelante.
Así, el equipo de gobierno insiste en que hay que ser muy claros en esta materia y que la complejidad del problema requiere de soluciones serias. “Nunca vamos a negar el problema que tenemos en nuestra ciudad, ni tampoco vamos a engañar a los vecinos diciendo que nuestras calles van a pasar de ser las más sucias de la región a las más limpias en tres meses. Nuestro compromiso es que, con mucho trabajo, grandes iniciativas y una mejora notable de la gestión, la limpieza volverá para quedarse en nuestras calles a medio plazo”, asegura el portavoz del gobierno municipal, Diego D. García.