En Toledo, aún recuerdan aquella pareja de técnicos que tenía el Toledart. Como cara visible, Jesús Velasco, quien tiempo después se convertiría, año tras año, en el mejor entrenador del mundo. A su lado, un joven Tino Pérez. Aquella unión en el banquillo sirvió para fraguar una relación de amistad, pero, también, para forjar la leyenda de dos de los entrenadores de fútbol sala más valorados de los últimos años.
Sus caminos se separaron y siguieron ganando títulos cada uno en un puerto distinto. Sin embargo, para siempre había quedado una idea, un estilo que han llevado a cada uno de sus destinos. Jesús Velasco lo ganó todo con el Movistar Inter. Siete años que estuvieron cargados de éxitos y alegrías. Su salida obligó al club a buscar una alternativa que estaba clara en la cabeza de los dirigentes. Querían que fuese su discípulo más avanzado: Tino Pérez.
El Inter lo puede todo
Rumanía, Rusia, Azerbaiyán y, por último, Italia, han sido los lugares a los que Tino, después de triunfar en España, ha llevado su idea. Una idea que, según nos cuenta él mismo, puede ser “mejor o peor, pero es la mía y, hasta ahora me ha traído hasta donde estoy”. Charlamos con él antes de comenzar una temporada complicada, en la que tendrá, como principal objetivo, recuperar la vitola de un Inter campeón.
Y, a pesar de llevar tan solo un mes dentro del club, ya sabe cómo funciona: “es fundamental que tengamos esa presión, esa exigencia para estar en lo más alto. Ese es uno de los secretos que tiene este club”. Sabe que con su fichaje como entrenador, se marca una línea continuista, remarcando que es “una persona de la línea de Jesús Velasco”. Como reto personal, mejorar lo logrado por el anterior técnico: “es muy difícil igualar lo que Jesús ha hecho durante estos siete años, pero vamos a intentarlo”.
Es fundamental que tengamos esa presión, esa exigencia para estar en lo más alto. Ese es uno de los secretos que tiene este club
Con Jesús sigue en contacto, aunque, entre risas, nos reconoce que “ahora está viajando mucho, está disfrutando de sus vacaciones”. Asegura que, del trabajo realizado por Velasco, se aprovechará, cambiando lo mínimo, “simplemente matizando y añadiendo”.
Ricardinho, otra dimensión
La pasión con la que habla de Jesús Velasco es similar a la que desprende cuando le preguntamos por Ricardinho. “Cada día me entusiasma más”, afirma, asegurando que “trabaja muy bien. Para mí es una ventaja que un jugador con el peso nacional e internacional que tiene él, sea un ejemplo dentro de la pista. Es espectacular”.
También se rinde al fichaje estrella de esta temporada: Pito. Del ex jugador del Pozo destaca que “va a aportar otro poco de magia. Es un jugador que sonríe ya desde por la mañana y eso lo lleva al juego”. Tino, Ricardinho y Pito se estrenarán en Torrejón de Ardoz el próximo 6 de septiembre. Reconoce sentir ese nerviosismo que le da sentido al deporte: “es la primera vez que vamos a competir de forma amistosa en nuestra casa y siempre te sientes más responsable delante de las familias, de los amigos, te sientes con un poco más de peso. Pero también es muy ilusionante”.
Tino Pérez vuelve a casa después de diez años de aventura. Su familia, sobre todo, agradece la vuelta a España, aunque el técnico toledano no descarta volver a probar fortuna fuera: “han sido muy buenas experiencias, yo he aprendido mucho fuera, me he sentido también muy valorado, así que no tengo momentos malos para recordar”. Esperemos que, antes, triunfe en nuestro Inter. Suerte, míster.