Erick nació con tan solo 28 semanas de gestación con una grave lesión en la cabeza llamada leucomalacia periventricular
Erick nació con tan solo 28 semanas de gestación con una grave lesión en la cabeza llamada leucomalacia periventricular que conllevaría una parálisis cerebral infantil. Esta lesión produce un cambio de estado, de viscoso a sólido, de una parte que recubre el exterior del cerebro, evitando que por esa zona haya flujo de la actividad cerebral. Esto deriva, entre otras cosas, en daño motórico con rigidez en piernas, brazos, manos, mandíbula, etc. La epilepsia, estrabismo, hipermetropía y el campo visual disminuido también son otros síntomas.
Desde los 4 meses de vida, Erick asiste a terapias que le han ayudado a aprender a sentarse, a caminar, a utilizar cubiertos, a usar lapiceros (motricidad fina) e incluso a hablar. El trabajo diario de fisioterapia, logopedia, psicopedagogía, equinoterapia, hidroterapia, neuropsicología y terapia ocupacional son las que hacen posible que Erik pueda ir mejorando poco a poco, pero son tratamientos muy costosos.
Por este motivo, en 2020 se creó la asociación sin ánimo de lucro “Las gafitas rojas de Erick” en la que cualquier persona puede colaborar haciendo donativos para ayudar, por ejemplo, a financiar las gafas que lleva o las ortesis para sus pies, que le ayudan a caminar mejor. Además, también pueden ver la evolución del pequeño.
“Estoy muy contenta por haber podido participar en un evento que une deporte y solidaridad y que mi presencia haya podido servir para ayudar a recaudar fondos para Erick y que su familia pueda seguir financiando los tratamientos que necesita para mejorar la calidad de vida de este pequeño guerrero que lucha cada día”, afirmó Miriam Gutiérrez.