La Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid ha sancionado al Centro de Mayores Casablanca Valdesur de Valdemoro por vacunar irregularmente a ocho personas. El centró coló a familiares de los trabajadores para que estuvieran dentro del plan de vacunación. La administración ha impuesto una de las sanciones más leves que recoge la normativa. Según informa eldiario.es, el Gobierno Autonómico ha acordado una multa de 1.000 euros que ha sido reducida a 600 euros por el recurso ofrecido por la compañía.
Desde la Consejería se abriría un expediente informativo al centro de mayores después de que eldiario.es publicara el pasado 5 de enero que se desviaron las dosis del plan de vacunación para proporcionárselas a familiares de los trabajadores. Estos estaban fuera del plan establecido por el Gobierno Regional que priorizaba a los residentes y profesionales sociosanitarios.
La multa económica impuesta es de 1.000 euros, siendo esta cantidad inferior a lo que expresó la directora de Salud Pública, Elena Andradas, preguntada días después de la publicación de eldiario.es de la presunta irregularidad. Andradas afirmó que existía una “infracción administrativa, la sanción podría oscilar entre 3.000 y 15.000 euros”. Por lo que Sanidad ha definido la infracción como "leve" a lo ocurrido, donde la pena más elevada supondría un coste de 3.005 euros.
Desde eldiario.es se comprobó como familiares de la plantilla de la residencia habían recibido la vacuna, según la confirmación de varias fuentes del parking del centro de mayores. En la investigación se ha constatado que fueron ocho personas las que se vacunaron antes de que les correspondiese, partiendo de que fueron seis las vacunadas en un principio.
Pese a que varios trabajadores reconocieran el pasado 5 de enero la vacunación irregular, la directora del centro decidiría negar estas acusaciones. Tras la publicación en eldiario.es, el grupo Casablanca emitiría un comunicado reconociendo las infracciones cometidas por centro declarando “se ha vacunado a varios sacerdotes que nos asisten espiritualmente en los centros del grupo, voluntarios que están en contacto con los mayores de forma habitual y algunos mayores de riesgo familiares de algunos empleados”.