En medio de un paraje natural donde reinan los conejos y el color rojizo característico de las flores veraniegas, muy cerca del emblemático club de Tiro con arco Villa de Valdemoro, se hallan unas canteras de yeso bien conocidas que dieron de comer durante siglos a habitantes de Valdemoro y alrededores. Tras su clausura en la década de los 70´ hasta hoy, se han convertido en un auténtico vertedero de toda clase de residuos, desde neumáticos - como curiosidad hay todo un circuito de motocross dentro del mismo espacio elaborado con las mismas ruedas-, electrodomésticos varios, desde frigoríficos, congeladores, lavadoras... hasta sillones y peluches. Por haber, hay hasta unos bancos de piedra los cuáles datan de la década de los 70´-80´.

Quiénes reinan allí son los conejos, quiénes corretean a su libre albedrío entre todos los escombros, una imagen tan cierta como triste, y es que, debido al tipo de suelo que posee la cantera, hace que el agua no se filtre, creando hasta lagunas y pequeños ecosistemas en las cada vez más escasas épocas de lluvia, pues en las mismas canteras se han encontrado un tipo de rana única en el mundo. La situación preocupa y mucho a los más jóvenes del municipio, ya que desde el Ayuntamiento no se hacen cargo debido `al alto coste´ por eso Alejando y María han querido mostrarnos cuál será el itinerario que realizarán todos los últimos domingos de cada mes, entre todos los voluntarios que acudan a la batida.