Evitar el uso y el abuso de sustancia perjudiciales para la salud o comportamientos que provoquen trastornos de conducta en la adolescencia es el objetivo primordial de los cinco talleres que el Área de Servicios Sociales ha propuesto este curso a través de su Programa de Prevención y que se incluyen en la Guía de Actividades Educativas que el Ayuntamiento de Valdemoro ofrece a los centros del municipio y en el que ya han participado 2.500 estudiantes de los IES Maestro Matías Bravo, Neil Armstrong y Villa de Valdemoro y de los colegios Lagomar y Valle del Miro.
Las nuevas tecnologías han irrumpido entre los adolescentes con sus enormes posibilidades y también son sus riesgos. Para combatirlos, se ofertan sendos talleres de prevención del uso y abuso del juego online y redes sociales.
En ambos, se pone de relieve la irrupción de las TIC en la vida cotidiana de los más jóvenes y su relevancia creciente en los procesos de socialización. Por eso, quienes participan en estos talleres aprenden a utilizar las nuevas tecnologías de forma creativa, soslayando ese consumo compulsivo que puede generar dependencia.
El consumo de sustancias que perjudican la salud sigue ocupando un lugar destacado entre los riesgos a los que se expone la juventud. Fomentar el sentido crítico en la adolescencia es la base para que los jóvenes incorporen información sobre los riesgos que entraña el consumo de drogas. Se trata de facilitarles herramientas que les permitan acercarse al conocimiento científico de las adicciones y a los efectos que la drogodependencia puede tener sobre sus órganos y sobre su conducta para, a partir de ahí, ser capaces de tomar decisiones responsables.
Los talleres buscan que los jóvenes resuelvan conflictos sin conductas agresivas, respetando otras opiniones y estilos de vida
El Programa de Prevención concede una importancia similar a la salud emocional en la adolescencia, sabiendo que la salud mental juega un papel esencial en esta etapa de la vida. Así, quienes asisten a estas charlas aprenden a desarrollar su autonomía afectiva, al tiempo que abordan la ética del cuidado, la expresión emocional y la empatía, siempre con herramientas de comunicación y negociación que les aporten experiencias satisfactorias.
La prevención también alcanza a la gestión de conflictos entre adolescentes, poniendo en valor el respeto y la tolerancia como normas fundamentales de conducta. Se trata de inculcarles que, aceptando otras opiniones y estilos de vida, se pueden resolver las tensiones por medios no violentos. Quienes participan en este taller pueden adquirir valores, hábitos y conocimientos basados en el respeto y el entendimiento.
A esta oferta se suman las actividades deportivas dirigidas a jóvenes de 12 a 17 años que con la práctica de baloncesto, fútbol o voleibol tendrán la oportunidad de conocer estilos de vida sanos y de adquirir hábitos saludables, al tiempo que promueven alternativas de ocio que les alejen de situaciones de riesgo. El trabajo en equipo, la superación personal o el respeto a las normas contribuyen a afianzar conductas beneficiosas para el cuidado de la salud física y mental. Para facilitar la integración social, se abordan aspectos como la autoestima, la presión grupal, el manejo de las emociones o la tolerancia a la frustración.