Los vertidos de aguas fecales que van a parar al Arroyo de la Vega vuelven a salir a la palestra en Villaviciosa de Odón. Una situación que, con el tiempo, se ha ido agravando y que, pese a las insistencias de los vecinos y vecinas del municipio, sigue sin subsanarse. Tampoco sirvió para arreglar el problema la aprobación, en el Pleno Municipal de diciembre de 2017 (con José Jover (PP) al frente de la alcaldía), de una iniciativa para canalizar las aguas que contaminan el arroyo a través de la instalación de una estación de bombeo. Y no sirvió por la sencilla razón de que no se llegó a realizar.
La espera desespera, pero lo peor son las consecuencias para el medioambiente que, según pasan los años, se vuelven más irreversibles. Según ha podido recoger Telemadrid en un reciente reportaje, y en palabras de representantes de Ecologistas en Acción y la Asociación de Vecinos de Villaviciosa de Odón, el Arroyo de la Vega suma ya los 3.000 millones de litros de agua contaminada.
La gran pregunta es cómo se ha llegado a esta situación. Los vecinos aseguran que todo comenzó en el año 2000, tras la destrucción de la depuradora existente para llevar a cabo el desdoblamiento de la M-501. No se quejan de la medida, por considerarla necesaria para la ejecución de las obras, pero no alcanzan a comprender por qué no se ha sustituido por otra o por qué no se construye la estación de bombeo necesaria para arreglar la situación, máxime cuando ya ha sido aprobado en sesión plenaria.
La concejala de Medioambiente Mercedes Castañeda asegura que la situación se revertirá "muy pronto"
Los residuos, las toallitas y el hedor casi insoportable son los protagonistas de un entorno del que lo único que debiera llamar la atención es su naturaleza. Desde Ecologistas en Acción, lamentan que "este agua no se puede usar para absolutamente nada", descartando, por completo, el consumo humano, pero también el agrícola o el de cualquier otra actividad. "El impacto económico es considerable", matizan.
Ahora, la piedra está en el tejado del nuevo equipo de Gobierno de Villaviciosa de Odón, capitaneado por el alcalde José Luis Pérez Viu (Cs), que ha cogido 'a rebufo' la situación. La concejala de Medioambiente Mercedes Castañeda ha asegurado que la situación se revertirá "muy pronto", pero no se atreve a hablar de plazos, entre otras cosas, porque una cuestión de competencias. "Solo falta un informe de conformidad por parte del Canal de Isabel II para terminar de sacarlo adelante". Lo que sí recalca es que "nos hemos implicado muchísimo porque es un problema de vital importancia para Villaviciosa de Odón, es indecente y no se puede consentir".
Según ha podido saber Soyde., tanto Castañeda como el alcalde tienen agendada una próxima reunión a finales de este mes de enero con altos cargos del Canal de Isabel II para conocer en qué punto se encuentra la negociación y "por si faltara algún legalismo en el que tuviéramos que interceder" para llevar a cabo la esperada solución a los vertidos.