El Río Guadarrama, cuyo cauce fluye por diferentes municipios del Oeste de la región -entre ellos, Navalcarnero-, preocupa desde hace años a vecinos, administraciones y asociaciones ecologistas, dado el estado en el que se encuentra este entorno natural, enclave protegido dentro de un Parque Regional, caracterizado por una acumulación de basura, restos de desguace y escombros, que han hecho de el mismo un vertedero ilegal.
En el mes de marzo, 'Ecologistas en Acción' volvía a denunciar, una vez más, y después de 15 años de existencia del problema, el desastre medioambiental que suponen estas toneladas de enseres, plásticos, desperdicios y electrodomésticos a su paso por puntos determinados, como el localizado entre Arroyomolinos y Móstoles, a la altura del poblado de Las Sabinas. Hace apenas unos días, el pasado 20 de abril, tenía lugar en Batres una reunión interadministrativa con el fin de consensuar posturas entre diferentes entidades implicadas.
En este sentido, desde el Ayuntamiento de Navalcarnero denuncian que, ante el expediente sancionador abierto por parte de la Confederación Hidrográfica del Tajo a los Consistorios de Móstoles, Arroyomolinos y Navalcarnero por la falta de limpieza y de retirada de residuos sólidos, el municipio "no es competente ni está autorizado a limpiar el río Guadarrama, pero además, en nuestro término municipal ni existen asentamientos ilegales ni zonas desde las que se viertan residuos al río Guadarrama".
"El municipio de Navalcarnero es el principal perjudicado por los vertidos y el estado de conservación del río Guadarrama. Ante esta situación y en diversas ocasiones, el Ayuntamiento ha abierto expediente y puesto en conocimiento de los organismos responsables, Confederación Hidrográfica del Tajo y Parques Regionales de la Comunidad de Madrid, su obligación de mantener limpio el cauce del Guadarrama", sostienen al respecto, añadiendo que "el Consistorio ha informado a la Fiscalía de Medio Ambiente de todos los expedientes abiertos para buscar soluciones y buscar responsables de los vertidos, con el objetivo de solucionar los graves perjuicios ocasionados. Como no podía ser de otro modo, en estos expedientes figuran los contratos y labores de limpieza realizadas en las zonas que son competencia municipal", indican.
La CHT, dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), alcanzó en 2020 un acuerdo con los Ayuntamientos afectados para poner en marcha este plan de choque conjunto en el tramo entre Móstoles y Batres, con la finalidad de proteger el ecosistema fluvial y sus valores ambientales. Para ello, se encargó a TRAGSA una retirada de residuos, que "debía acompañarse de tareas de vigilancia y control por parte de las administraciones municipales (aparte de la autonómica) para evitar la aparición de nuevos vertidos", tarea "a la que se instó a los Ayuntamientos y que, a pesar de las advertencias efectuadas, no se ha llevado a cabo", tal y como se desprende de la respuesta trasladada por parte del Gobierno central al grupo parlamentario Vox, en referencia a esta problemática.
Desde Navalcarnero no hay vertidos al río Guadarrama ni el Ayuntamiento está autorizado a limpiarlo.
En esta línea, el Ayuntamiento afirma limpiar y recoger los residuos en las zonas del Parque Regional que pertenecen a su término municipal, así como los márgenes del río, evitando cualquier tipo de vertido desde Navalcarnero, que "es el único municipio que tiene un contrato que recoge estos términos, tal y como ya conocen la CHT y la Comunidad de Madrid".
"Sin embargo, y argumentando la existencia de un convenio firmado con los ayuntamientos, la Confederación Hidrográfica del Tajo ha iniciado un expediente en el que reclama a Navalcarnero una parte de los gastos de limpieza invertidos en el cauce del Guadarrama en 2020. El Ayuntamiento de Navalcarnero, por su parte, ha reclamado ya a la Confederación copia del convenio aludido, que no figura en los expedientes municipales", explican, y concluyen argumentando que "nuestro municipio y nuestros vecinos son los principales perjudicados por la inacción de otras administraciones que, lejos de cumplir sus competencias, desplazan a otros sus cargas y responsabilidades".