El campus de la Universidad Rey Juan Carlos en Alcorcón se expande, al igual que en la localidad vecina de Móstoles, con la construcción de un nuevo edificio multidisciplinar, cuyas obras empezarán a ejecutarse este mismo año.
El proyecto, a cargo del Estudio Seguí, se constituye en torno a la sostenibilidad en todas las instalaciones y procesos constructivos, empleando para ello elementos como mallas metálicas, que controlan la entrada de luz solar en función de la orientación de las fachadas y las necesidades de cada área, actuando como un filtro y generando un mayor aprovechamiento de la misma.
Asimismo, su diseño incluye un sistema de pérgolas ajustables, que permite la iluminación natural del patio principal durante el invierno, además de soluciones que mejoran la cohesión visual del conjunto y técnicas de automatización lumínica, las cuales contribuyen a una mayor eficiencia energética.
El enfoque también creará un ambiente más cómodo y agradable para los usuarios del edificio
Desde un punto de vista estructural, su diseño consta de una división en la que cada planta tendrá dos partes, las cuales estarán separadas por un patio iluminado cenitalmente. A su vez, éstas se bifurcarán en dos alas, lo que se traducirá en amplios espacios abiertos en el interior.
Esta disposición se ha planteado pensando en la versatilidad y adaptabilidad requerida para albergar tanto laboratorios como aulas, cumpliendo así con los objetivos de los programas docentes de la universidad, según han trasladado los autores del proyecto.
En esta línea, persigue el objetivo de representar también "la innovación y el testimonio de la evolución constante y el respeto por las necesidades educativas". Un "hito arquitectónico", que "se convierte en un símbolo tangible del progreso y la modernización" y que "define el futuro de las estructuras educativas".